El blog del Plástico

Una de las mayores revoluciones industriales que nos quedan por vivir lo que resta de década es el cambio en los procesos de producción de series cortas. Hasta ahora habíamos vivido en un mundo en el que sólo había dos maneras de hacer las cosas: En enormes series, o en tiradas artesanales.

Producir coches con chapa estampada sólo tiene sentido cuando vas a fabricar centenares de miles de unidades. Hacer menos no es rentable. Por eso, cuando un fabricante ha de crear un prototipo para analizar un coche, suele incurrir en enormes gastos y pérdidas de tiempo para preparar prensas de estampación especiales que tal vez se usen para unos pocos miles de unidades, lo que incrementa el coste exponencialmente.

Ford ha presentado esta semana un peculiar sistema de «estampación-embutición» de planchas metálicas que nos ha dejado sorprendidos. Mediante dos «dedos», la chapa toma forma mediante un proceso de deformación progresiva, que permite crear piezas para prototipos o para series cortas de una manera mucho más rápida y efectiva.

No te lo pierdas en vídeo, porque si te va esto de la ingeniería, quedarás gratamente sorprendido.